¿Y después de los Reyes Magos?

Es cierto. El tiempo sigue corriendo. Las fiestas van y vienen. Como la Navidad y sus sueños, la naturaleza y sus ritmos (ya escribí sobre ello https://bit.ly/3GtCkhC). Y los Reyes Magos ya pasaron. ¿Y ahora qué?, le pregunto a mi amiga del alma.

Nos quedan los restos de inocencia que alimenta el asombro, la capacidad de asombrarse, me contesta.

¿Me lo dices de verdad?

Sí, claro. Hay un niño en cada uno de nosotros, como recordó en su momento Carl Gustav Jung y otros. Y la inocencia es esa parte del alma que toma contacto con el movimiento. Y el movimiento es proceso.

¿Qué?

Desde la celebración del renacimiento del año en el inicio del solsticio de invierno (curiosamente en época pagana el 25 de diciembre), hasta la llegada de los Reyes Magos, pasan doce noches. Hay quien las llama las doce noches santas.

Me suena muy místico.

Te sonará a lo que sea. Pero aterrízalo como un recordatorio.

¿De qué?

Del recorrido de la bóveda celeste repartida en doce constelaciones, como ya postulaba la más antigua astronomía.

Ya me he perdido.

Tómalo como un recorrido al reencuentro con la esperanza y ese asombro que te he comentado antes. Además, es muy visible. Mira a tu alrededor.

Y mi amiga del alma me da para leer “La Mirilla” en la página 2 de “La Vanguardia” que se publicó por Navidad. La escribió Eva Ubiedo, especialista en diseño gráfico. Describe su encuentro casual con la escritora Cristina Campos, finalista del premio Planeta 2022, por el libro “Historias de mujeres casadas”. Un libro atrevido que disecciona la infidelidad femenina acogiéndola, sin juzgarla.

El relato de Eva me conmueve. Me sorprende. Sí, me asombra. Me asombra su asombro (https://bit.ly/3vYjDOA).

Todavía conmovido y sin saber muy bien qué decir, mi amiga del alma me muestra ahora el libro “Panikkar hoy”, de Fragmenta Editorial. Escrito por casi 20 autores, cada uno con su capítulo, sobre el atrevido filósofo y teólogo Raimon Panikkar.

Mi asombro viene porque descubro que mi hermana Anna es uno de estos autores (https://bit.ly/3CHPxTa). También me conmueve. También me asombra.

No hay dos sin tres, como los tres Reyes Magos. Y mi amiga saca de su particular biblioteca “La divina Florència” (Pòrtic Edicions), también “Florencia a través de sus personajes” (Editorial Diéresis), de la siempre sorprendente e inquieta periodista Sílvia Colomé. Desde Dante y su amada Beatrice, al hermetismo de Paolo dal Pozzo Toscanelli, un sabio en la sombra del que sacó partido el pintor renacentista Pesello.

Un libro lleno de magia y sensibilidad en el que no falta tampoco Anna Maria Luisa di Medici, la heroína Antonia Masanello o la propia controvertida y bienvenida insolente Oriana Fallaci.

Queda mucho por leer, queda mucho por recorrer, desde ese atrevimiento casi infantil y el poder del asombro.

Después de los Reyes Magos, sigamos asombrándonos desde esa parte nuestra inocente durante los doce meses siguientes del año. ¿Por qué no?