sobre mí

Soy persona inquieta y curiosa. Vitalista, existencialista. También he profundizado en las aportaciones de Carl Gustav Jung y Rudolf Steiner. Empecé a meditar a los dieciséis años, construyéndome mis propios mandalas.

 

Periodista en La Vanguardia del Grupo Godó desde 1989, desarrollando mi labor en algunos de sus suplementos como ES-Estilos de Vida, Magazine, Código Único y H.Hombre de Vanguardia. También he pasado por las secciones de Opinión, Vivir en y Edición, del diario, además de haber participado en la coordinación editorial de algunas publicaciones especiales del Grupo Godó. Desde el 2019 soy autor del blog Entrefronteras. Y desde el 2024 miembro del equipo asesor de la Fundación Triform.

 

En el 2012 fui premiado por el mejor reportaje publicado en España sobre el dolor (titulado “Umbral del dolor”). Y en el 2019 fui premiado por la Lliga Reumatològica en la celebración de su treinta aniversario destacando mi labor periodística por mi reportaje “La nebulosa del reuma”.

 

También he colaborado en revistas especializadas en salud y espiritualidad, además de haber dado clases de posgrado en algunas universidades privadas, así como talleres y conferencias sobre meditación, sobre las relaciones humanas entre amigos, parejas, hijos, sobre los conflictos, sobre el sentido de vida, sobre la confianza, sobre la libertad, sobre la expresión de las emociones y un largo etcétera, así como en un debate televisado (en París hace más de treinta años) sobre la incidencia de la informática en la cohesión social de la juventud.

 

Coautor de un capítulo del libro de Ramiro Calle “La ciencia del sosiego” (Kailas Editorial). Cofundador a finales de los ochenta de la Comunidad Libre de Barcelona. Durante siete años formé parte del consejo asesor de Athenea, un centro especializado en fracaso escolar.

 

Trabajé tres años en TV3 desde su fundación, y después me incorporé durante un año en el Consell Joventut de Barcelona para crear el gabinete de prensa. Posteriormente coordiné las publicaciones del SIPAJ (Servei de Informació i Promoció d’Activitats Juvenils) hasta entrar en La Vanguardia en 1989.

 

Licenciado en Ciencias de la Información por la Universitat Autònoma de Barcelona en 1985; diploma en Relaciones Internacionales de la Universidad Menéndez Pelayo en 1987; diploma de posgrado en Morfopsicología del Instituto Superior de Morfopsicología de Julián Gabarre en el 2020; máster en Triformación Social y Desarrollo de Organizaciones de Triform Institute de Luis Espiga en el 2021.

 

He practicado taichi durante bastantes años y después me cogió el gusanillo por el aikido, un arte marcial con el que sintonizo sobre la manera de gestionar y neutralizar la agresividad del otro aprendiendo a gestionar tu parte del cerebro reptiliano, donde reside tu propia agresividad. Conseguí sacarme el cinturón negro tras años de práctica, en el 2016. Y como me gusta el mar también me saqué el carnet de patrón de embarcaciones de recreo. Mar y montaña. En mis años universitarios ejercí de monitor de esquí. 

 

Antes que periodismo empecé a estudiar Ingeniería de Telecomunicaciones, pero abandoné tras el primer curso universitario. Sencillamente quería más tiempo para compaginarlo con mis otras aficiones, como la música, el teatro y el cine, aunque finalmente tampoco terminé la carrera de piano en el Conservatorio de Música de Barcelona. Me quedé a mitad de camino.

 

Ciencia y arte es una combinación fabulosa. Al menos esta es mi vivencia. Todo me aporta, todo me construye, todo me abre puertas que me lleva a lugares insospechados.

 

Mi curiosidad también me llevó a sacarme el diploma en masaje terapéutico por la Federación Politécnica Española de Diplomados (Fedine), a finales de los años ochenta. Y a principios de los años noventa formé parte de uno de los primeros grupos de hombres en España donde reflexionábamos y trabajábamos qué es la masculinidad a las puertas del siglo XXI. También participé en talleres dirigidos por el antropólogo Josep Maria Fericgla, en los eneagramas y test de Hartmann con Gemma Guarch, y en los talleres de MHA de Rosa Navarro sobre sexualidad, tantra y vínculo materno.

 

Soy un puzzle andante donde todas las piezas son importantes, van encajando…

Por cierto, me acompañan tres hijos y dos nietos… Me siento querido y respetado, aunque a veces todavía me pongo nerviosillo. Sigo en proceso.